sábado, 7 de noviembre de 2015

Te quiero o Te amo?

-“Te amo” - dijo el principito…
-“Yo también te quiero” - dijo la rosa.
-“No es lo mismo” - respondió él…

"Querer es tomar posesión de algo, de alguien. Es buscar en los demás eso que llena las espectativas personales de afecto, de compañía…
Querer es hacer nuestro lo que no nos pertenece, es adueñarnos o desear algo para completarnos, porque en algún punto nos reconocemos carentes.
Querer es esperar, es apegarse a las cosas y a las personas desde nuestras necesidades. Entonces, cuando no tenemos reciprocidad hay sufrimiento. Cuando el “bien” querido no nos corresponde, nos sentimos frustrados y decepcionados.
Si quiero a alguien, tengo expectativas, espero algo. Si la otra persona no me da lo que espero, sufro. El problema es que hay una mayor probabilidad de que la otra persona tenga otras motivaciones, pues todos somos muy diferentes. 
Cada ser humano es un universo.
Amar es desear lo mejor para el otro, aún cuando tenga motivaciones muy distintas.

Amar es permitir que seas feliz, aún cuando tu camino sea diferente al mío. Es un sentimiento desinteresado que nace en un donarse, es darse por completo desde el corazón. Por esto, el amor nunca será causa de sufrimiento.
Cuando una persona dice que ha sufrido por amor, en realidad ha sufrido por querer, no por amar. Se sufre por apegos. Si realmente se ama, no puede sufrir, pues nada ha esperado del otro.
Cuando amamos nos entregamos sin pedir nada a cambio, por el simple y puro placer de dar.
Pero es cierto también que esta entrega, este darse, desinteresado, solo se dá en el conocimiento. Solo podemos amar lo que conocemos, porque amar implica tirarse al vacío, confiar la vida y el alma. Y el alma no se indemniza.
Y conocerse es justamente saber de vos, de tus alegrías, de tu paz, pero también de tus enojos, de tus luchas, de tu error. Porque el amor trasciende el enojo, la lucha, el error y no es solo para momentos de alegría.
Amar es la confianza plena de que pase lo que pase vas a estar, no porque me debas nada, no con posesión egoista, sino estar, en silenciosa compañía.
Amar es saber que no te cambia el tiempo, ni las tempestades, ni mis inviernos.
Amar es darte un lugar en mi corazón para que te quedes como padre, madre, hermano, hijo, amigo y saber que en el tuyo hay un lugar para mí.
Dar amor no agota el amor, por el contrario, lo aumenta. La manera de devolver tanto amor, es abrir el corazón y dejarse amar.”

-“Ya entendí” - dijo la rosa.

-” No lo entiendas, vívelo” -dijo el principito.

viernes, 16 de octubre de 2015

Hay que estar loco...

Para amar hay que estar loco, porque se supone que cuando amas pones a esa otra persona por encima de tus propias necesidades básicas y por lo tanto el amor puede considerarse como la ausencia total del egoísmo para con otra persona.
Se puede probar lo que digo ya que nadie es capaz de lastimarse o generarse algún daño físico sin estar loco, es por eso que cuando amas entras en un estado de locura y la prueba a esto es que por naturaleza NO puedes provocarte un daño hasta sangrar y esto es porque somos EGOISTAS. 

Y bien dije que cuando amas 100% a alguien lo pones por encima de vos mismo y al hacer esto violas tu propia naturaleza de auto protegerte…
 

jueves, 1 de octubre de 2015

AMOR

Ahora nadie realmente me está escuchando,

 pero yo quiero hacerle una canción a mi amor.

 Como no he tenido amores duraderos, nadie va a pensar que estoy hablando de sí cuando diga cosas del abrazo, de las despedidas y los besos.
 El beso de que hablo se lo pude haber dado a mi guitarra.

 Los rostros son como estaciones, pasan llenos de hojas amarillas, de soles ardorosos, de vientos arropados. 
Nadie tiene estaciones en su haber. Todo el mundo se queda bajo su piel caliente. El calor y la brisa retozan afuera, la verdad y la mentira retozan afuera, los proyectos de cielo, la paciencia del tiempo, una sombra en la que crees ver la luz, pero tanto la aurora como la cruz quedan afuera.
 Es aire que se respira y que se deja: se queda.
 Heme aquí hablando al mismo ritmo de muchas direcciones, de mil oscuridades que han servido para emprender abrazos, sitios donde han rodado tantos cuerpos vacíos o plenos. Para qué describir el pelo del amor, si el pelo del amor cambia de forma. Para qué pronunciar los vanos trazos con que a veces descubro el desconcierto. 
No digo, no hablo.
 Yo no describo la risa del amor, pues si acaso dijera que su risa amanece en la buena penumbra de una calle desierta, que hay un sol sumergido en sus labios terribles, mis ojos fueran manos en la oscuridad, y no: son ojos, pese a todo son ojos mis ojos.
 Mi amor existe y nunca se peina ni ríe ni mira.
 Es amor solamente.

 Sólo amor.

Miedo?

Nunca podré descubrir cuales son mis miedos mas profundos, 
son como un péndulo que oscila entre
creer lo que no creo o morir sin saber para que...
Es dificil definir palabras con palabras,
mucho mas aún encontrar sentido a los sentidos,
sin que suene a un inocente juego de palabras vacias.
Mi miedo quizás se asemeje a la
sensación vacía de no tener mas miedo.
Miedo al final...
Porque siempre el final te desangra, sin defensas...
-Gonzalo Luna
Distingo excusa y resultado y hoy elijo estar con vos!